La pareja de artistas Pichiavo (compuesta por Pichi y Avo, nombres por los que se les conoce familiarmente) diseñan murales por todo el mundo. Su arte, urbano salpicado de clasicismo, se puede encontrar en diferentes ciudades europeas, americanas o africanas.
Acostumbrados al gran formato, Pichiavo ha ido evolucionando a lo largo de los casi quince años que llevan trabajando juntos. Sus creaciones son una mezcla de lo que ambos son, de dónde vienen, de la cultura donde han crecido. “Al principio nos sorprendía que aquellos murales que creábamos con el tiempo se convertían en iconos de las ciudades donde estaban”, señalaron Pichiavo a lo largo de su intervención en Estímulo Valencia 2022 y añadieron que “esto finalmente te hace ser consciente del poder artístico que tienes”. Pichiavo pinta muros en las ciudades, pero también lo hace en empresas privadas, festivales, eventos, etcétera.
A lo largo de su ponencia, los artistas explicaron que han ido generando un proceso creativo propio conforme han ido evolucionado y han logrado mejores resultados. Actualmente, en sus murales primero pintan el grafiti y después desarrollan la figura clásica, cuando al inicio de su andadura lo hacían justamente al revés. “Del grafiti nace la escultura clásica, del fondo creado. Toda obra artística requiere su tempo y, para poder hablar y valorarla, hay que disfrutar del final”, señalaron los artistas valencianos.
Tras años pintando en la calle, se adentraron en el mundo del estudio. “Fue algo más por demanda, pero era una evolución lógica en nuestro arte”, señalaron y explicaron que entre las grandes complicaciones que encontraron fue “cómo trasladar la obra de gran formato a una pieza adaptada al hogar”.
Al cambiar el formato, la forma de trabajar también debe modificarse. Así que finalmente acabaron pintando en oleo. Pichiavo explicó que constantemente cuestionan su trabajo y las formas de llevarlo a cabo. Solo de esta forma logran evolucionar. Primero realizan un boceto, “con los típicos círculos y palitos, luego le vamos dando forma desarrollando la idea que tenemos en la cabeza, se hace más tangible hasta que podemos entender la obra”.
El mural, la obra de estudio y el siguiente paso en su evolución ha sido la escultura. “Es un gran reto para nosotros, tenemos que trasladar nuestra pintura a una escultura. Es algo que nunca hemos hecho, pero somos artistas que se atreven con diferentes formatos”, apuntan.
Algo que también apuntaron a lo largo de su exposición, al igual que el resto de ponentes, es la necesidad de poner pasión a todo lo que se hace. “Seguimos jugando mientras realizamos nuestras obras, nos divertimos, disfrutamos, nos atrevemos con diferentes cosas, etcétera, esta es una de las claves de la creatividad”.
Además, señalaron, el hecho de trabajar en diferentes formatos y con diferentes personas te abre puertas a posibles colaboraciones interesantes. Trabajan con arquitectos, marcas, restaurantes…
Los artistas urbanos agradecieron el hecho de trabajar con un excelente equipo de profesionales, ya que es la única forma de poder llevar a cabo los diferentes proyectos en los que se embarcan. “Es difícil estar en todas las acciones del proceso creativo y de producción, nosotros somos la cara, pero tenemos un gran equipo detrás que hace posible que nuestras obras, nuestras ideas, nuestra creatividad vea la luz”.